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SUSCRIBITELlegó la última semana del año y, con ella, el trauma de las mascotas. El habitual uso de pirotecnia en las fiestas es muy dañino para el sistema auditivo de perros y gatos, porque estas mascotas escuchan el doble que los humanos y los estallidos pueden provocarles lesiones muy graves.
El oído humano tiene la capacidad de escuchar hasta 20 mil hertz, mientras que estos animales domésticos pueden captar frecuencias hasta los 40 mil. Es decir, tienen la aptitud de escuchar sonidos tan agudos que el hombre ni siquiera puede percibir.
Las fiestas de fin de año constituyen el período más traumático para las mascotas. Los fuegos artificiales les provocan estrés, nervios y miedo. Como ejemplo, vale aclarar que un perro puede escuchar un sonido débil a una distancia entre cuatro y cinco veces mayor que un ser humano. Por eso, el ruido causado por el estallido cercano de un petardo le puede llegar a ocasionar graves daños auditivos.
Por lo tanto, y como todos los años, los integrantes de la Sociedad Argentina Protectora de Animales -SAPA- recomiendan ubicar al animal en el lugar más aislado de la casa, y con algún juguete para que se entretenga. Es recomendable que alguien se acerque periódicamente para hacerle compañía y ver cómo se encuentra.