Desde hace mucho tiempo que las elecciones presidenciales en un país no significa una fuerte repercusión solo en el territorio que elige gobernantes, sino que tiene una crucial importancia en toda la región a la que pertenece. Por eso, toda Latinoamérica mira con gran recelo los resultados que se den en la segunda vuelta de las elecciones en Colombia, que disputarán Gustavo Petro y Rodolfo Hernández el próximo 19 de junio.
Gustavo Petro, a cargo de Pacto Histórico con Francia Márquez, ganó las elecciones con el 40,32% de los votos, aunque la victoria es algo agridulce, ya que el objetivo de la fuerza era que Petro sea presidente tras ganar en primera vuelta con el 50% de los votos, porque la segunda vuelta podría ser más complicada.
Sin embargo, deberá enfrentar otra cita electoral para definir la presidencia con Rodolfo Hernández, quien venció a Federico Gutiérrez y alcanzó la instancia de balotaje.
Estas elecciones fueron catalogadas como históricas porque la izquierda nunca había ganado los comicios presidenciales en Colombia, que es considerada una nación históricamente conservadora.
Por eso lo que preocupa a Petro es que para la segunda vuelta Hernández reciba el apoyo de los votantes del resto de los candidatos que quedaron afuera en esta primera vuelta. Aunque sacó 12 puntos de diferencia, sabe que es difícil que quienes no lo votaron el pasado domingo decidan elegirlo el 19 de junio.
Rodolfo Hernández, la sorpresa
Pero también hay un factor adicional para que Petro se alarme por su futuro presidencial y es que Rodolfo Hernández llega a las elecciones casi por la ventana, como una sorpresa, con una imagen creciente y con posibilidades de, por eso, atraer a los indecisos. Es un candidato independiente de corte populista y consiguió el 28,20% de los votos.
Llegó a ganar popularidad, principalmente en zonas rurales, con su discurso anti-político y anticorrupción y con una campaña en redes sociales que muchos analistas destacan como “espectacular”.
“La primera vuelta fue la prueba de que es posible unir a Colombia para avanzar hacia el futuro. El cambio no es el odio, el cambio es la posibilidad de unirnos para vivir mejor”, escribió en su cuenta de Twitter el candidato. “Hoy perdió el país de la politiquería y la corrupción, hoy perdieron los que creían que serían gobierno eternamente, hoy ganó la ciudadanía, hoy ganó Colombia”, añadió en un comunicado en el que asegura que no les fallará a quienes los votaron y se muestra esperanzado de ser el próximo mandatario del país.
Colombianos cansados del uribismo y el oficialismo de Iván Duque
En estas elecciones quedó en claro el desgaste del oficialismo entre los colombianos, ya que el candidato Federico Gutiérrez, cercano a las fuerzas representadas por el expresidente Álvaro Uribe Vélez y por el actual mandatario, Iván Duque, quedó en tercera posición con el 23,87% de los votos.
Así, es la primera vez en más de 20 años que Uribe no tiene un candidato para disputar el Poder Ejecutivo. Sin embargo, Gutiérrez brindó su apoyo a Hernández, señalando que “es la mejor opción para la democracia” y que, por contrario, la campaña de Gustavo Petro, es “un peligro”.
Por eso, la posible unificación de votantes para Hernández pone en riesgo el futuro presidencial de Petro, que deberá reforzar su campaña para el próximo 19 de junio.
