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SUSCRIBITEMAR DEL PLATA.- Verónica González fue condenada a la pena de prisión perpetua como autora del crimen de su esposo, Carlos Bustamante, ocurrido en marzo de 2019 en su casa de Miramar y donde, en 2011, también había sido asesinado el hijo menor de ambos, Gastón, asesinato que nunca pudo ser esclarecido.
Los integrantes del Tribunal Oral en lo Criminal N°4 consideraron que durante el juicio oral y público que se desarrolló durante las últimas dos semanas quedaron a la vista pruebas suficientes para considerarla responsable de un homicidio cometido con alevosía y además agravado por el vínculo.
González llegó a esta instancia detenida, condición que se le impuso casi dos meses después de la violenta muerte de Bustamante a raíz de contradicciones en las que incurrió cuando se le pidieron detalles sobre sus movimientos el día del hecho que se investigaba.
Los jueces Alfredo Deleonardis, Gustavo Fissore y Fabian Riquert escucharon a peritos y testigos que contribuyeron a reconstruir los momentos previos y posteriores al homicidio.
Así pudieron confirmar que a Bustamante, según relataron los forenses, lo mataron a golpes en la cabeza con un doble ataque. Primero en el dormitorio, donde lo habrían sorprendido en momentos en que dormía. Y luego en el living, hasta donde podría haber llegado por propios medios, en un intento de pedir ayuda.
Policías que testimoniaron durante este juicio aseguraron que encontraron a la víctima con vida pero sin fuerzas como para darles algún nombre o referencia de quién lo había atacado.
Tanto la fiscal del caso, Ana María Caro, como la representación legal del particular damnificado habían solicitado al tribunal que se imponga a González la pena de prisión perpetua. González no quiso declarar durante el desarrollo de las audiencias.
Hijos mayores de Bustamante, que se acercaron hasta tribunales para escuchar el fallo, ratificaron que siempre sospecharon de González como autora del crimen en razón de una muy mala relación de pareja que tenían y no ocultaban.
La ahora condenada deberá cumplir la pena en la Unidad Penal de Batán, donde se encuentra alojada desde mediados de abril de 2019.
Su nombre también sonó cuando se investigó el crimen de su hijo Gastón, ocurrido en 2011 también en el interior de la vivienda que compartía con Bustamante. En aquel caso la mecánica de muerte fue estrangulamiento.
Por el hecho llegó a juicio quien entonces era novio de la hermana de Gastón, también hija de González. Resultó absuelto ya que no se encontraron evidencias contundentes que certificaron su autoría en el crimen.