“La Reina del Tusi”, como se hacía llamar, se movía con comodidad entre los más jóvenes a pesar de casi doblar en edad al promedio de los asistentes a after beach y fiestas donde buscaba y multiplicaba clientes a los que les vendía variedad de drogas sintéticas.
La investigación que la puso en la mira al inicio de esta temporada permitió seguirla y confirmar su presencia en los distintos espacios donde se concentraba la movida nocturnas o “previas”, como son las propuestas que se generan en distintos paradores en coincidencia con el atardecer.
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Policías encubiertos, filmaciones y fotografías son parte del despliegue avalado desde la Fiscalía Especializada en Estupefacientes para avanzar en esta pesquisa que tenía certeza de estar detrás de una protagonista fuerte de la comercialización de drogas de diseño en la costa atlántica.
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Sus productos, de los que presumía por su calidad, tenían valores de venta desde 15.000 a 25.000 pesos el gramo. Una suma que se considera muy alta pero que no asusta a un perfil de asistentes a las principales fiestas electrónicas, caracterizadas por acercar a turismo extranjero solo para bailar al ritmo de su DJ favorito.
La acusada, de 38 años, quedó detenida y en próximas horas deberá afrontar declaración indagatoria por infracción a la ley de estupefacientes, delitos por los que ya tenía antecedentes en Capital Federal.