La renovación de autoridades en la Unión Tranviaria Automotor (UTA), que tuvo esta semana sus elecciones a nivel nacional y local, sigue con aires de conflicto en Mar del Plata a raíz de planteos cruzados entre representantes de ambas listas participantes.
Se dio la particularidad que la lista Celeste y Blanca, que para la conducción nacional proponía la continuidad del actual secretario general, Roberto Fernández, ganó con una diferencia de 10.000 votos por sobre la Lista Azul, única adversaria.
Pero en el orden local la situación fue inversa: los afiliados marplatenses apoyaron en su mayoría la propuesta de la Lista Azul “Juan Manuel Palacios”, que con Maximiliano Escriba como principal candidato resultó ganadora con una diferencia de 85 votos por sobre la del actual titular seccional, Adrián Giménez.
“Nadie puede asumir que no sea quién está determinado para hacerlo, que somos nosotros”, dijo Damián Maldonado, miembro de la actual comisión directiva local. Es que, según argumentó, a pesar de haber sufrido una derrota tendría de su lado que las condiciones pautadas en este gremio hablan de una “lista sábana” que involucra el resultado nacional en los resultados distritales.
“Roberto Carlos Fernández es el ganador y nosotros en la seccional”, insistió Maldonado, que desestimó cualquier posibilidad de reclamo de la oposición local, aun cuando hayan conseguido en esta jurisdicción mayor cantidad de votos.
Desde la Lista Azul ya advirtieron que insistirán con el pedido para que se les entregue la conducción seccional del gremio que ganaron en las urnas. Y advirtieron que si el 3 de enero próximo, fecha de recambio de autoridades, no pueden asumir podrían recurrir a medidas de fuerza contundentes. “Estamos dispuesto a dejar la temporada sin servicio hasta que no nos reconozcan como ganadores”, aseguraron.