En un clima distendido, Mauricio Macri y el Papa Francisco se reunieron por segunda vez. Al encuentro, que duró más de una hora, el jefe de Estado asistió acompañado por su mujer, Juliana Awada, y sus hijas Antonia, Valentina y Agustina, estas dos últimas de sus respectivos matrimonios anteriores.
En la conferencia de prensa posterior en la embajada argentina en el Vaticano al encuentro con el Sumo Pontífice, el Presidente reveló que su hija menor, Antonia, "llevó una lista de preguntas" para Francisco. Entre otras cosas, la pequeña le preguntó "si él tenía papá, si dormía así vestido y que comía".
“Fue un momento muy gracioso. El Papa se rió mucho con el cuestionario de Antonia”, contó Macri en la rueda de prensa con periodistas acreditados en el Vaticano y enviados especiales.
El mandatario ya había contado que el propio Francisco le había solicitado expresamente que llevara a Antonia para el segundo encuentro previsto para esta mañana en un sala anexa al aula Pablo VI del Vaticano.