Gabriel Mestre, el obispo de la diócesis de Mar del Plata, pasó este viernes por en el ciclo “Hablemos claro”, en Canal 8, y analizó la situación social de la ciudad. “La droga es un problema serio y grave en nuestros barrios”, lamentó.
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SUSCRIBITEGabriel Mestre, el obispo de la diócesis de Mar del Plata, pasó este viernes por en el ciclo “Hablemos claro”, en Canal 8, y analizó la situación social de la ciudad. “La droga es un problema serio y grave en nuestros barrios”, lamentó.
Desde que asumió en 2017, opinó que la situación de la indigencia y la pobreza en Mar del Plata "ha empeorado". "La indigencia y la pobreza han crecido de manera particular, sobre todo en lo referido a nuestros niños, niñas y adolescentes, que le da un plus de mayor gravedad. El fenómeno de la inflación ha marcado de manera negativa todo este tiempo”, sostuvo.
“Lo vemos en los ámbitos donde está la comunidad de la Iglesia, Caritas y la Noche de la caridad, lo percibimos con claridad”, explicó. Y advirtió que un elemento complejo que se suma a esta situación es la droga. “En los dispositivos del Hogar de Cristo de la diócesis buscamos dar un tipo de respuesta una realidad sumamente compleja”, dijo Mestre.
La problemática de la droga “atraviesa todos los ámbitos sociales, pero emerge de manera más clara, tal vez por la falta de posibilidades concretas, en las personas de barrios populares”. “La realidad más inmediata de lo financiero, económico o la situación social de la violencia, no nos dejan ver para proyectar un país, una ciudad vivible, sostenible, a lo largo de los años”, consideró.
Para el obispo “faltan políticas de Estado sostenibles”. “Los planes están para responder a una emergencia, tienen que estar en un punto, pero no tienen que ser eternos. No hay que ser planero pero no podemos dejar sin asistencia a aquellas situaciones de gravedad”, expresó.
En un año político, de cara a las próximas elecciones, consideró que gane quien gane, “la situación del país será compleja”. En este sentido, descartó la visita del Papa Francisco a la Argentina durante el 2023. Pero consideró que el próximo año “sería interesante la figura del Papa (en el país) para ayudar a serenar, pacificar y encaminarnos en un proyecto de país donde tengamos que poner el hombro en cada ámbito específico para sacar la Argentina adelante”.
Mestre afirmó sus deseos de continuar como obispo de Mar del Plata: “Me veo sumamente proyectado en Mar del Plata. Me siento como pez en el agua, porque es mi ciudad, mi diócesis y me siento feliz sirviendo desde mi lugar”.
Sobre la beatificación de Pironio, se mostró confiado. “La Junta Médica del Vaticano aprobó el milagro que mandamos desde la diócesis del caso que Franco, que aspiró purpurina y estuvo grave. La iglesia no pide el milagro, pide en el informe que digan que no hay una causa natural con la cual se pueda explicar cómo una persona se recuperó”, explicó.
Y agregó: “El Vaticano tiene un comité mixto de médicos cristianos y ateos o agnósticos, para ratificar esta cuestión. El Papa lo recibe, decreta el milagro y se da la beatificación, aunque no hay por el momento una fecha para su beatificación formal”.