El español experto en padel surf, Carlos Toro, se refirió desaparición de Emmanuel Soria y Maxi Ludvik y las posibles hipótesis sobre lo que pudo haber ocurrido con los jóvenes marplatenses desaparecidos en Málaga.
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SUSCRIBITEEl español experto en padel surf, Carlos Toro, se refirió desaparición de Emmanuel Soria y Maxi Ludvik y las posibles hipótesis sobre lo que pudo haber ocurrido con los jóvenes marplatenses desaparecidos en Málaga.
La conclusión a la que ha llegado es que “remaban poco y avanzaban mucho”, piensan que podrían ir “a unos cuatro o seis kilómetros por hora; por lo que, si esto duró media hora se adentraron dos kilómetros y medio”.
La familia no quiere aventurarse a crear ninguna hipótesis sobre qué ocurrió, pero Camila Soria expresa que “lo único que puede decir es que seguramente se fueron bastante lejos y no pudieron salir”.
"Es un mar que conocemos porque entrenamos mucho y los regímenes de viento. La noche anterior ya soplaba mucho el viento, el domingo por la mañana soplaba mucho el viento, estaba de norte y eso significa que te lleva mar adentro con el peligro que eso supone . El mar está en calma pero el viento te impide volver", valoró Toro, experto en padelsurf, conocedor del Mar Mediterráneo, Team Rider del equipo Mistral, profesor en Toro SUP y autor de Desafío Toro.
Y agregó: "Puede ser que se hayan fiado de ese viento que los llevaba fácil hacia adentro y en algún momento parece que pudieran perder la tabla pero eso es especular sobre lo que pasó".
Carlos Toro ha ampliado al medio La Opinión de Málaga que, en un día en el que el viento sopla como en el que desaparecieron los jóvenes, “no hace falta remar porque el propio cuerpo de cada chico se convierte en vela y puedes llegar a moverte a dos kilómetros por hora”.
La familia cataloga aquel pasado 27 de agosto como “un día raro” para el mar Mediterráneo. “En Mar del Plata el mar es mucho más movido y acá siempre está planchado, pero las corrientes son muy traicioneras. Quizás se confiaron y cuando empezó el viento fuerte, ya no podían volver”, señalan.
“Ojalá estén vivos los chicos, nosotros seguimos teniendo la esperanza”, sostienen. A pesar de la actitud de confianza, se plantean la posibilidad de que aparezcan los cuerpos sin vida, pero cuestionan que las instituciones “ya solo buscan cuerpos”.
El padre de Maxi, Jorge Ludvik, hace hincapié en que no se van a ir de España “con las manos vacías, que “tienen que seguir buscándolos”. Camila Soria agrega que, aunque los chicos ya no estén con vida, “quieren encontrar los cuerpos para poder repatriarlos a su país y despedirlos con su gente, que es mucha la que los espera en Mar del Plata y que están luchando desde allí como pueden para que esto no pare”.
Maxi tiene 29 años y Emmanuel 34, y la familia habla de ellos como unas personas “buenas, sanas, educadas y excelentes”. Salvamento Marítimo inició la búsqueda el lunes 28, pero Camila agrega que “entiende que no se pudiese sacar la embarcación por la madrugada, pero que está segura de que las primeras horas habrían sido cruciales”. Sin embargo, recalca que saben que “buscaron mucho, pero que estuvieron muchos días para ver unas cámaras en las que no encontraron nada, que el video lo pasó un turista y que la tabla la vio una embarcación privada”.
En principio, la familia se queda en Málaga hasta el 20 de septiembre, aunque Jorge Ludvik insiste en que “si para ese momento no sabemos nada, agotarán “todos los recursos posibles”. Necesitan “cerrar esta etapa para descansar y estar tranquilos”.